¿Es acidez estomacal o acalasia? Tienen algunas cosas en común, pero no son lo mismo. Si bien ambos pueden causar problemas para tragar y la sensación de que los alimentos regresan a la garganta, la acalasia ocurre cuando los procesos que llevan los alimentos al estómago no funcionan como deberían.
La acalasia es rara. Aproximadamente 1 de cada 100,000 personas la contraerá. Aunque la afección no se puede curar, el tratamiento te ayudará a vivir con ella.
¿Qué está pasando?
Todos tenemos un anillo de músculo entre el esófago, el tubo por el que pasan los alimentos, y el estómago. Se supone que el músculo se abre para permitir que los alimentos y los líquidos pasen al estómago. Tu esófago también ayuda a mover los alimentos hacia el estómago.
Si tienes acalasia, ninguno de estos procesos funciona bien. El esófago no puede empujar la comida hacia abajo. Además, la válvula no se abre por completo. Esto hace que la comida quede atrapada en la base del esófago.
La acalasia no ocurre de la noche a la mañana. Puede tomar años desarrollarse, y algunas personas ignoran los síntomas durante años antes de ir al médico.
Causas
Los expertos no están seguros de por qué ocurre la acalasia. Pero los problemas genéticos y del sistema inmune pueden estar involucrados.
Síntomas
El síntoma más importante de la acalasia es la dificultad para tragar líquidos y alimentos sólidos.
Las personas con la afección también pueden experimentar:
- Dolor en el pecho, especialmente después de comer
- Los alimentos vuelven a la garganta
- Acidez
Comer dentro de las 4 horas de acostarse puede empeorar los síntomas. Los alimentos como la carne y el pan también pueden causar problemas.
Diagnóstico
Debido a que los síntomas de la acalasia son tan parecidos a la acidez, tu médico puede tratar el ardor de estómago primero. Si eso no funciona, probablemente te examinará para detectar acalasia.
Puede mirar hacia su garganta con una herramienta especial llamada endoscopio. Tiene una pequeña cámara unida a un tubo largo para que el médico pueda ver el esófago.
La prueba de deglución de bario es una prueba de detección común para la acalasia, llamada manometría. Un médico te pasa un tubo delgado por la garganta para evaluar la fuerza de los músculos del esófago mientras tomas sorbos de agua. También mide qué tan bien funciona la válvula del estómago.
¿Necesitas cirugía?
La cirugía es el tratamiento más exitoso para la acalasia. Con la cirugía, la mayoría de las personas obtendrá un alivio a largo plazo de los síntomas.
El procedimiento más común se llama miotomía de Heller. La mayoría de las veces se hace usando un telescopio con una cámara y una luz, junto con otros instrumentos. El médico hace varios cortes pequeños en el abdomen y usa las herramientas quirúrgicas para llegar al área en la que necesita trabajar. El objetivo de la operación es abrir parte del esófago inferior para facilitar la deglución. Suele ser muy exitoso.
Otra opción quirúrgica se llama miotomía endoscópica peroral, o POEM. Con este procedimiento, los médicos no tienen que cortar fuera del cuerpo. En cambio, el médico inserta un endoscopio (una pequeña herramienta con una cámara en el extremo) en la boca y baja por la garganta. Una vez que ve adentro, hace un pequeño corte en el revestimiento interno de tu esófago. Él hace un túnel a través de él para llegar al músculo interno del esófago inferior, donde hace otro corte. Esto ayuda a que sea más fácil tragar.
Ambas cirugías suelen ser exitosas. Pero pueden causar reflujo ácido en algunas personas que lo tienen. Tu médico discutirá qué procedimiento podría ser mejor para ti.
Tratamiento sin cirugía
No necesariamente necesitas cirugía para la acalasia. Hay muchas otras cosas que pueden ayudar, pero generalmente no funcionan tan bien. Y es posible que debas realizar múltiples procedimientos.
Algunas opciones son:
Inyecciones de un medicamento relajante muscular. Tu médico inyecta Botox (toxina botulínica) en los músculos tensos del esófago. Esto ayuda a relajar los músculos temporalmente para que puedas tragar normalmente.
Estiramiento del esófago (dilatación neumática). El médico inserta un globo en la válvula entre el esófago y el estómago y lo explota para estirar los músculos tensos. Es posible que necesites hacer este procedimiento varias veces antes de que te ayude.
Medicamentos. Dos clases de medicamentos, nitratos y bloqueadores de los canales de calcio, tienen efectos relajantes musculares LES. Estos medicamentos pueden disminuir los síntomas en personas con acalasia.
Tu médico también puede inyectar un tipo de medicamento en el esófago que ayudará a que la comida baje mejor. Pero solo dura de 6 meses a un año.
El mejor tratamiento para ti depende de muchas cosas diferentes. Tu médico puede ayudarte a decidir lo que necesitas.
Viviendo con acalasia
No existe una dieta especial para la afección, pero puedes descubrir por tí mismo qué alimentos pasan a través del esófago con mayor facilidad.
Beber más agua con las comidas puede ayudar. A veces, las bebidas carbonatadas como las colas también ayudan. La carbonatación parece ayudar a empujar la comida a través del esófago.
Si tu acalasia es severa, una dieta líquida puede ser tu mejor opción por un tiempo. Siempre habla con tu médico acerca de obtener los nutrientes adecuados si no estás comiendo alimentos sólidos. Si pierdes mucho peso, asegúrate de decirle a tu médico porque podría significar que está desnutrido.
Algunas personas con acalasia tienen riesgo de cáncer de esófago. Por esta razón, es muy importante tener visitas regulares con tu médico.
Referencia médica de WebMD revisada por Nayana Ambardekar, MD el 9 de septiembre de 2018
Referencias:
Pandolfino, J. JAMA , 12 de mayo de 2015. https://jamanetwork.com/journals/jama/fullarticle/2290635
Vaezi, M. American Journal of Gastroenterology , agosto de 2013. https://journals.lww.com/ajg/toc/2013/08000
Centro de información sobre enfermedades genéticas y raras, Institutos Nacionales de Salud: “Acalasia”. https://rarediseases.info.nih.gov/espanol/12789/sindrome-de-triple-a
La medicina de la Universidad de Chicago: “Acalasia”. https://gastrolat.org/DOI/PDF/10.0716/gastrolat2016n100008.pdf