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El bacalao es un pescado que viene de los mares fríos del norte.  Por eso, tradicionalmente ha llegado seco, salado. Desde los primeros viajes de los conquistadores no ha parado de llegar.  Tiene una carne blanca exquisita, es fuente de las mejores grasas y resulta más sano que muchos otros peces grandes, pues se alimenta de arenques y sardinas, peces pequeños donde no se presenta alta acumulación de mercurio.

Este guiso sencillo es una preparación exquisita.

Ingredientes

  • 1 libra de pescado salado
  • 2 dientes de ajo
  • 1 tomate
  • 2 cucharadas de aceite
  • cebolla en rama, cilantro y sal al gusto

Preparación

  1. Remoja el pescado varias veces en agua fría para quitarle la sal el pescado y cocínalo luego (sin echarle sal). Una vez cocido se deja enfriar y se le sacan las espinas
  2. Aparte, prepara una salsa con 2 cebollas, dientes de ajo bien molidos, tomate y cilantro; agrega 2 cucharadas de aceite y sofríe
  3. Cuando esté la salsa, añade el pescado, revuelve y baja del fogón y déjalo reposar por 3 minutos
  4. Sirve con limón y acompaña con arroz blanco y guineo cocido

 

Fuente: Kelly M. Arboleda