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El mal aliento puede afectarnos a todos en cualquier momento de nuestra vida y lo más común es refugiarnos en una menta o en un spray; no quitan el mal aliento, lo cubren, por eso es necesario encontrar la raíz del mal aliento y resolverlo por completo.

Son varias las causas del mal aliento y cada una puede resolverse de manera simple con algunos de los remedios propuestos aquí:

Mala higiene dental y bucal

La lengua y las encías requieren cepillado y el uso de la seda dental al menos después de cada comida.

Las abuelas, sabían que ir al dentista era costoso y doloroso, cuidaban el cepillado y decían que había que cepillarse al menos 10 veces por cada lado cada diente. Usaban ceniza y bicarbonato y no las cremas dentales de ahora, pero les funcionaba y no se exponían a tantos químicos

El hilo dental de ahora también permite limpiar los intersticios entre los dientes, evitando que las bacterias habitantes de la boca se alimenten y generen mal olor. En fin, no hay razón para que hoy se acumulen residuos de alimentos en la boca y causen mal aliento.

Encías inflamadas

Es frecuente ver que las encías inflamadas, las glándulas adenoides o las amígdalas o los senos paranasales se infecten por presencia de alimentos o de células de defensa que combaten infecciones o alergias y ocasionan mal aliento.

En estos casos, ayuda eliminar alimentos como los lácteos o el gluten de la dieta. Una vez que desaparecen los alérgenos de la dieta, dejan de inflamarse los tejidos: encías, amigdalas, adenoides y senos y cavidades recobran su estructura normal, se desinflaman y dejan de oler.

Problemas digestivos

En muchos casos, el mal aliento se acompaña de problemas digestivos.

Una flora desequilibrada, producto de tratamientos con antibióticos, o uso de edulcorantes, o del consumo de carnes (de animales que en general han sido tratados con antibióticos) provocan la presencia de gases bacterianos en el tracto gastrointestinal.

Además, cuando se acompaña de gastritis crónica o mala digestión, el mal aliento proviene de la falta de enzimas digestivas o de problemas hepáticos, ocasionados por la falta de producción de ácido clorhídrico en nuestro estómago.

¿Qué puedes hacer al respecto?

  • Mejora la producción de bilis, hazlo consumiendo alcachofa y boldo
  • Aplaca la irritación de la mucosa del estómago con áloe (sábila)
  • Promueve la producción de ácido clorhídrico, puedes hacerlo con un suplemento de clorhidrato de betaína
  • Mejora la digestión enzimática, con enzimas digestivas encima de cada comida

Cada uno de estos mecanismos pueden ayudarte a mejorar definitivamente el aliento.

¡Pruébalos!