La vida moderna nos acostumbró a vivir rodeados de dispositivos; teléfonos celulares, microondas, Wi-Fi, computadoras, etc. Pero pocos somos conscientes de los posibles riesgos para la salud que presentan estos dispositivos y estas ondas.
Eliminar los campos electromagnéticos es decisivo para dormir mejor, mejorar el estado de ánimo y tener más energía, sin olvidar que se reduce el riesgo de desarrollar cáncer y enfermedades autoinmunes.
Hemos agrupado las mejores formas de limpiar nuestro hogar de de ondas electromagnéticas, en soluciones que son prácticas y requieren de muy poco esfuerzo y algunos consejos para viajar con menor exposición a la radiación. Sabemos que estos consejos no resuelven del todo el problema, pero ayudan a mitigarlo en gran medida.
Limpia tu hogar de campos electromagnéticos
- Siempre que puedas, desenchufa los dispositivos que no estés usando. Los tomacorrientes emiten energía y los aparatos gastan energía aún apagados (mira las lucecitas testigo que tienen encendidas), y más aún, si están conectados a una batería de computador o celular.
- Ciertas bombillas contienen mercurio, generando campos electromagnéticos y emiten 70% de mercurio al ambiente en los primeros 3 días después de su instalación. No uses bombillas de luz de mercurio en casa y opta por LED.
- Si no puedes apagar tu teléfono celular durante la noche, activa el modo avión o déjalo mínimo a 2,5 metros de distancia de la cama.
- No uses tu celular o computador a 1 o 2 horas de dormirte. La luz azul que emiten impacta la glándula pineal y afecta la producción de melatonina, alterando tu ciclo de sueño. Otra opción es conseguir un protector Night Shade que filtra la luz azul. Puedes incluso bajar aplicaciones que modifiquen el color de la pantalla del computador y el celular.
- Conéctate con la tierra. Descalzo o acostado en la tierra (en el pasto) se descargan electrones y protones adicionales que tengas.
- Limita el metal en tu cuerpo, ya que actúa como conductor de campo electromagnético (joyas de metal, por ejemplo).
- Apaga el Wi-Fi en la noche, o instala un temporizador mecánico en el modem del Wi-Fi, para que se apague automáticamente a la hora de dormir (hablamos de los simples relojes de panadería con baterías). El Wi-Fi desorganiza los fotones en tu cuerpo para que tus células no se comuniquen correctamente. No necesariamente ocurre con una exposición corta, pero la exposición constante te puede poner en riesgo.
Dato curioso: ¡las abejas dejarán una colmena si acercas el Wi-Fi!
- Consigue un medidor de campos electromagnéticos para revisar si tienes emisiones de los tomacorrientes, bombillas y aparatos y conocer dónde debes instalar filtros o realizar mejoras.
- Usa en lo posible zapatos con suela de cuero. Estas suelas funcionan como “polo a tierra” porque los campos electromagnéticos pasan a través de los zapatos hacia el suelo (lo que no ocurre con las suelas de caucho o goma, que bloquean la conexión eléctrica a la tierra).
- Si es posible, consigue almohadas o sábanas con conexión a tierra, esto ayuda a poner las frecuencias electromagnéticas donde pertenecen: en el suelo.
Consejos al viajar
- En un vuelo te expones a más radiación de día y algo menos cuando vuelas de noche.
- Cuando estés en el asiento del avión, quítate los zapatos de goma y pon los pies en el piso.
- Al aterrizar y luego de dejar las maletas, ve a caminar descalzo sobre la hierba o la tierra durante 5 minutos para descargar.