Si vas a beber alcohol, recuerda que el agua es tu mejor aliada. Toma al menos un vaso de agua después de cada copa de vino, cada cerveza o cada trago que tomes. Si se te olvida hacerlo, bebe mucha agua antes de acostarte o tan pronto te levantes en la mañana. El guayabo o resaca es el resultado de las toxinas del alcohol, la deshidratación y la hipoglicemia que da cuando tomas: todos estos problemas mejoran si tomas agua.