Frenar el crecimiento
El tomate es fuente de un compuesto de reconocidas propiedades antioxidantes y se ha comprobado que aumenta la sobrevida en casos de cáncer de próstata: el licopeno.
Consume tomate varias veces a la semana.
Escoge, de ser posible, tomates orgánicos, rojos, y prepara una sopa licuándolos o una salsa con aceite de oliva, ajo, tomillo o con cualquier mezcla que sea de tu gusto y cocínala para reducir su contenido de agua (el licopeno se libera especialmente al cocinar el tomate). Asegúrate de retirarles la cáscara y las pepas y usar sólo la pulpa.
Si no tienes tiempo, escoge los tomates enlatados que no tengan azúcar añadido.
Referencias:
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